Sin complejos.
Un ejemplos de sin complejos y forma de pensar. Una caravana de camellos atravesaba por el desierto. Al ver un oasis, el guía de la caravana decidió que pasaríamos la noche allí.
Los hombres instalaron de inmediato las tiendas para irse a dormir, pero cuando llegó el momento de atar a los camellos, se percataron de que les faltaba un poste. Todos los camellos estaban amarrados excepto uno.
Nadie quería pasar la noche en vela vigilando al animal pero tampoco querían perder al camello. Después de mucho cavilar, el guía tuvo la solución. Fue hasta el camello, cogió las riendas y realizó los movimientos necesarios para atar al camello a un poste imaginario. Para sorpresa de todos, el camello en cuestión se echó, convencido de que estaba bien atado. De esta manera todos pudieron ir a descansar.
A la mañana siguiente, desataron a los camellos y los prepararon para la marcha. Había un camello, sin embargo, que no quería ponerse de pie. Tiraron de él, pero el animal ni se movía .
Después de pasar un tiempo de intentonas inútiles acudió el guía de la caravana y de inmediato entendió la situación y la causa de la obstinación del camello. Se puso delante del animal y empezó a escenificar como si hubiese una estaca imaginaria delante del camello y comenzó ha realizar los movimientos típicos para desatar primero la cuerda a la estaca. Justo en ese segundo, el camello se puso de pie como si fuera un resorte. Ahora sí se sentía libre.
Nuestra imaginación no tiene límites (lo vemos en el cine, por ejemplo) todos los complejos y las situaciones a superar cosas que o bien no hemos hecho o no sabemos si lo haremos bien, a mi modo de ver las cosas, creo que son unas fantasías creadas, una ficción, de la cual podemos despertarnos en cualquier momento.
Lo más importante para superar un complejo es aprender a quererse uno mismo, aceptándose y valorándose tal y cómo cada uno es, con sus virtudes y defectos.